Existe alguien al otro lado que siente cómo su vida se desinfla.
Que observa por la cerradura de la puerta cómo se derrumba su historia.
Existe alguien al otro lado que descubre unas horas nuevas.
Un viaje en blanco.
Oportunidades con un gran lazo color rojo.
Ha merecido la pena el viaje. Las idas y venidas, los encuentros a medias, las habitaciones prestadas y alguna que otra lágrima. Ha merecido la pena la espera, los abrazos que no eran los nuestros, las horas compartidas desde lejos, las noches sin ti y los besos a la almohada.
Ha merecido la pena porque todo lo vivido lo he acumulado.
En mi cuenta de la vida.
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